Hoy se festeja el Día del Trabajo, para recordar a los llamados
Mártires de Chicago, los que el uno de mayo de mil ochocientos
ochenta y seis, en la ciudad norteamericana de Chicago, iniciaron
una huelga para exigir mejores condiciones laborales y que por
ello fueron reprimidos violentamente.
En nuestro país, también se tiene antecedentes de una lucha de la
clase trabajadora reclamando terminar con la explotación que
sufrían los obreros mexicanos y por ello se registraron las huelgas
de Cananea Sonora, el uno de junio de mil novecientos seis
auspiciado por la sociedad Secreta Unión Liberal Humanidad.
Para ello integraron un comité con quince de ellos y presidido por
el ayudante de minero Manuel M. Diéguez, un trabajador
sudcaliforniano de nacimiento, que después alcanzaría el grado de
General de Ejército en la Revolución Mexicana.
También en Rio Blanco Veracruz quiénes laboraban en las fábricas
de textiles, se declararon en huelga el uno de abril del mismo año,
en protesta por las malas condiciones laborales, que terminaría
casi un año después con la declaración de inexistencia legal por el
gobierno y obligando a regresar a sus labores el siete de enero y
ordenando el fusilamiento de los dirigentes del movimiento
obrero José Neira Gómez, Andrés Mota y Juan Olivar, que
habían formado la organización “Gran Círculo de Obreros Libres”,
lidereada por ellos y miembros del Partido Liberal Mexicano,
En el pueblo de Santa Rosalía, también en esos mismo años se
declararon en huelga, contra la empresa minera El Boleo de
capital francés donde igualmente fueron disueltos con el uso de la
fuerza pública, con lo que aportaron igualmente contribución a la
lucha de los trabajadores contra la explotación laboral.
Para contribuir a una solución a este conflicto de los mineros
sudcalifornianos el entonces vicepresidente de México José María
Pino Suarez, llegó a esta ciudad de La Paz con el propósito de
viajar a ese poblado donde funcionaban las minas de cobre, pero
por problemas de traslado no pudo llegar.
Con estos antecedentes que dieron origen a la celebración del Día
del Trabajo, es preciso reconocer que se trata de mantener
vigente la demandas de todos aquellos que ofrendaron su vida y
aportaron sus esfuerzos para sentar las bases de un sistema
laboral más justo en beneficio de la clase obrera.
Por lo tanto no debe ser propiamente un día festivo, sino
aprovechado para difundir la importancia que tiene fortalecer el
sentimiento de pertenencia a un movimiento la defensa de un
gremio como el sector laboral.