La celebración del “Día del Niño”, se propuso el veinte de noviembre de mil novecientos cincuenta y nueve, en la asamblea general de la Organización de las Naciones Unidas, celebrada en la ciudad de Ginebra Suiza, con la finalidad de reafirmar los derechos de este sector mediante la declaración para que les sean respetados.
En nuestro país para cumplir con este acuerdo del organismo internacional, se estableció oficialmente el treinta de abril de mil novecientos veinticuatro, por el presidente de la república el general Álvaro Obregón y como secretario de Educación Pública, José Vasconcelos, instituido con la finalidad de reafirmar los derechos de la población infantil, así como fortalecer las condiciones para su desarrollo integral y pleno.
Sobre ello en la primera celebración del Día del Niño en nuestro país, el secretario Vasconcelos, exhorto a las instituciones a fomentar la fraternidad y la comprensión hacia este sector poblacional y realizar actividades encaminadas a promover su bienestar el respetar sus derechos, que las escuelas fueran con alma”, para que los niños pobres, descalzos y hambrientos vivieran en ellas, como si fueran palacios, las mejores horas de su vida y guardaran recuerdos luminosos de su etapa escolar.
En nuestra entidad, las celebraciones por el Día del Niño, se efectúan particularmente en los planteles educativos y estancias infantiles, con festejos dentro de las escuelas y la participación de sus padres, pero también en el ambiente familiar o en establecimientos especializados para realizar convivios de niños.
Por lo que respecta a las instituciones oficiales igualmente efectúan, festivales públicos, pero en ninguno de ellos se resalta el propósito original al establecer esta celebración, que es precisamente el de promover respeto a los derechos del niño y propiciar condiciones apropiadas para contribuir a su pleno desarrollo social y familiar.
