Lic. Severo GOMEZ BELTRAN.
Cincuenta y un años, se cumplen hoy del atropellamiento de ejidatarios ocurrido en la carretera transpeninsular, en el tramo de La Paz a Ciudad Constitución, cuando realizaban una marcha a pie, hacia esta capital, demandando solución a sus problemas agrarios de la dotación de agua y regularización de tierras.
El contingente estaba conformado por campesinos pertenecientes a los cinco Nuevos Centros de Población Ejidal, Ley Federal de Aguas, en el Valle de Santo Domingo, afiliados a la Central Campesina Independiente (CCI), quese dirigían caminando hacia esta capital, cuando en el kilómetro ciento setenta seis, fueron arrollados por un vehículo, lo que ocasionó la muerte de catorce de ellos y dejando varios más heridos, que fueron atendidos en las instalaciones hospitalarias de la región.
Aun después del accidente, el resto del grupo continuaron su desplazamiento hasta esta ciudad, para exponer sus inconformidades al gobierno del estado quienesposteriormente lograron la dotación de sus derechos de agua para el cultivo de las tierras que recientemente en esa fecha habían recibido como dotaciones ejidales.
En el lugar del accidente se construyó un monumento conteniendo un número de columnas igual a la de los fallecidos y al fondo de ellas fue colocada una placa con el nombre de los fallecidos, la cual desapareció en los últimos años, al realizarse una remodelación de este conjunto arquitectónico luctuoso.
Por lo que en este monumento luctuoso ya no se perpetúa el nombre de sus compañeros fallecidos en la lucha por sus derechos para la dotación de aguas y regularización de las tierras ejidales, dentro lo que actualmente es el floreciente valle agrícola de Santo Domingo.