Las instalaciones de empresas distribuidoras de gas doméstico en esta ciudad, no resintieron daños en sus instalaciones debido a los vientos y lluvias que trajo consigo, esta semana el huracán Kay, por lo está descartado que puedan presentarse problemas de desabasto, pero su costo, mientras continúa aumentando cada semana por disposiciones federales.
PARA esta los que requieren adquirir el combustible en esa cantidad, las mismas empresas le explican, que deben acudir a la planta almacenadora ubicada en la carretera al sur cerca de la colonia Calafia o la dos estaciones que tienen instalada una en la Calzada Pino Pallas y la otra en la también Calzada Forjadores, llevando consigo los tanques para recargarlos.
El riesgo de que los conductores circulen con estos contenedores en el interior de sus unidades automotrices, está latente al recorrer las calles de la ciudad, para llegar hasta la zona suburbana, donde se encuentra la principal planta de almacenamiento, con el consecuente peligro de que, al involucrarse en accidentes de tránsito, se ocasione el escape del combustible.
Se desconoce las causas de esta suspensión del reparto a domicilio de estos cilindros de mayor capacidad, que ocasiona molestias a los que requieren de este servicio, que por ello lo califican perjudicial y riesgoso, porque además cada semana su precio aumenta y para quienes lo utilizan ya sean en las actividades domésticas, comerciales o industriales representa un gasto adicional transportarlo de manera personal en sus vehículos particulares.
A lo que se agrega que cada semana el costo aumenta y el precio establecido ahora para los cilindros de treinta kilogramos es de ochocientos cuarenta pesos y el de cuarenta es de mil doscientos cincuenta nueve pesos con cincuenta y cinco centavos y el litro para tanques estacionarios esta cotizado en quince pesos con nueve centavos, pero que a partir del próximo lunes podrán aumentar nuevamente.