Civilidad vs.Civilidad
Existen constancias en las páginas de este periódico, al igual que en Concepto, Colectivo, del arranque de quien conduce el palacio de cantera.
Lueguito se le vio la zanca al gallo: mecha corta, aceptación del debate y comunicación directa con la prensa, cuando así lo establezcan las oportunidades.
Conozco al señor gobernador desde hace mucho tiempo, pero ello no me da facultades más que las que pueda tener el ciudadano común y creo que se vencer las formas a seguir.
De joven fue muy inquieto y cuando la presté un texto titulado “Cuando la Revolución se cortó las alas,” Escrita por su asistente personal, Graciela Mondragón, a raíz de la muerte del revolucionario más limpio que se tenga memoria, el divisionario, Francisco José Mujica Velázquez.
Como seguramente se le achisparon más las neuronas.
No me cabe duda de su humanismo. Personas que después de trabajar 9 o 10 horas en palacio, han sido atendidas en la cochera de su domicilio, resolviendo los problemas antes de irse a descansar.
De esta manera el político resuelve problemas y me refiero al político, político, sea a la hora y lugar donde se encuentre.
En la última fotografía publicada hace unos días, se le ve con honda preocupación. Y no es para menos peor hasta eso problemas cotidianos se le agregan, quienes deben ponerse la camiseta y no lo hacen, entonces las cosas no van a salir bien.
Esto ya es del conocimiento y del dominio público de quienes no han tomado el papel que les corresponde. Insistimos, el suscrito no tiene conocimiento que exista un cargo de VICEGOBERNADOR, que un secretario genera de Gobierno, no quiete los golpes que suelen darse y están pensando más en la silla central del Palacio de Cantera.
La frase de este día: como dicen los pescadores nórdicos, desde el fondo de su corazón: buen viento y buena mar…