Por Alfredo González González
Castro Cosío – Edith Aguilar Villavicencio
De positiva se catalogó la gira del trabajo por el norte de la entidad de Víctor Castro Cosió. Lo anterior reafirma el concepto de que La Paz no es todo el estado. Desde 1954 cuando la compañía francesa “El Boleo” dio por terminada la concesión o la explotación del cobre y otros minerales el pueblo se negó a morir.
Demostraron los cachanias su convicción y su reciedumbre y con la ayuda del gobernante de la época Agustín Olachea Avilés general hecho con pólvora de a de veras lograron a base de esfuerzos seguir de pie. Ha sido anunciada desde días pasados una fuerte inversión que notifique la economía del municipio cuyas delegaciones están separadas por distancias prolongadas desde San Marcos Tierra hasta Puerto Nuevo e Isla Natividad más las comunidades de Bahía Tortugas, La Bocana y abreojos fueron puestas de pie con entereza de tal suerte que quienes han ocupado la comuna mulegina les ha sudado el lomo.
En la gira le acompaño Edith Aguilar Villavicencio, presidenta municipal de Mulege que ha venido demostrando esa entereza que le negaron sus antepasados desde aquellos bravos que echaron al invasor norteamericano de Mulege Pueblo que se ganó el calificativo de heroico por la defensa del dos de octubre de 1847.
Edith es una mujer empeñosa, con ideales y una vocación extraordinaria por su pueblo donde ha visto como la gente lucha y trabaja todos los días pero de pronto ve que algunas esperanzas se marchitan.
Tuve la intención de hacerle una entrevista obviamente por teléfono porque a nuestra edad y con problemas en una extremidad resultaría problemático para un servidor. No fue posible porque después de los cinco días cruzamos un par de palabras rápidamente y me dijo: “Yo le voy a hablar porque tengo una reunión y por la tarde una audiencia”. Eso demuestra fuerza de carácter y que a la gente hay que escucharla. Ir a los lugares en donde están los problemas, donde duele más porque el gobierno municipal es el gobierno de los vecinos.
Los pueblos de Baja California Sur tienen sus singularidades. Los cachanias tienen algo especial. El trato inmediato es de afecto, de amistad, de broma pero también es de exigencias que seguramente y dado el apoyo que Castro Cosío le está brindando pese a que es un gobierno panista es doblemente reconocido el hecho de que le hagan no sentirse sola.
Amiga Edith, eso es lo que quería decirte, animarte, y desde luego las mejores vibraciones para que des buenas cuentas al final del trienio. Conozco a tu gente, recuerdo con singular afecto a Rigo Garaizar, a René Rouller “El Pavi”, aquel que hacia la trilogía que vivía en Mesafrancia así como al tejano Castro uno de los mejores y extraordinarios tercera base que se haya visto, al pelón Garaizar, a los Apodaca López, a mi amigo ex presidente municipal Orozco, a Mario Vargas Aguiar. Al güerito murillo y a Arturo su hermano, Toño Hinojosa y así se podría mencionar de tortugas, de Puerto Nuevo porque doy gracias a Dios que he dejado amigos por donde quiera. Que tus pasos sean firmes y acertados.
Un saludo al Lic. Raúl Rousseau.
