Alfredo González González
1.- Una voz que merodeaba en palacio: llaman a la puerta, presidente.
2.- Usted, amigo lector, tiene la última palabra.
3.- Figuras de hombres avanzan por la faja norteña.
4.- Apareció una zeta grande en la plancha del Zócalo.
La voz se escucha tersa, meliflua: “señor presidente, llaman a la puerta central de palacio”. Una voz autoritaria repuso: “ quién diablos es”. No sé, señor. Solamente aparece una hoja con una “Z” mayúscula que debe tener algún significado. Este despacho se escribe por las condiciones tan críticas como se encuentra el país. “una paz de ahuevo” como aquella paz porfiriana donde el otrora un doloroso militar era el más desesperado por morir en combate contra los franceses, dio un giro de 360 grados y para empezar, habilitó a las fuerzas federales para que asesinaran a 20 mil yaquis. La historia pareciera repetirse pero si yo soy tu amigo te daré la mano hasta el final pero si te la entrego y me traicionas entonces ni eres mi amigo, ni eres mi hermano. El país diariamente se encuentra en conflictos y aquellos que no les saben mal el bocado que se llevan a la boca con la sangre de los pobres y el llanto de los inocentes, periodistas pedorros como los llama a veces el inefable diputado federal que es chile de todos los moles, se niegan a reconocer que han existido errores tras errores.
De este modesto comentario tendrá la palabra usted amigo lector, sin temor alguno y tendremos la obligación de publicar si es con respeto, cualquier replica que quiera enviarse, parece haber sido reporte la cacería de periodistas que se han atrevido a hablar con la verdad, qué el asesinato de mujeres sea el pan cotidiano, que se apliquen métodos de acusar sin pruebas, aquellos que se han atrevido a dar una opinión que no esté de acuerdo con el señor. La democracia no se escribe así. La democracia se escribe con la verdad y no con el tintineo de las monedas con las cuales entregaron a Cristo. ¿Están de acuerdo que el gabinete este compuesto por un Manuel Bartlett al que se le cayó el sistema para que perdieran la elección en su tiempo a Manuel López Obrador? Sin embargo está tejiendo los hilos conductores de la energía eléctrica.
Hoy soplan vientos de fronda, el rumor parece venir de la parte norte de la república y hay un muchacho al que se le debe cuidar, hijo de un tigre de bengala que quiso cambiar el orden de las cosas porque ya está bien de tanta estupidez y tanta locura política. Se necesita tener mucha clase y nos referimos a la capacidad, a la ética, a la ciencia política en general. Pero no podemos conformar a un pueblo con los mendrugos que sobran, y después exigirles un voto a favor. Llegó un informe que puso pensativo al presidente: “había aparecido una Z gigantesca frente al zócalo”, lenguaje de una sola letra que indica ¡Esta vivo!
Las últimas noticias que se dejaron sentir fue que fuertes columnas se desplazaban por la parte norte de la república. Se veían más macizos que sujetos amparados con cien mil guardias, entre ellos algunos que matan mujeres campesinas por la espalda.