Acudí personalmente a darle las gracias a mi amigo, colega y compañero de mil batallas prof. Alfredo González González, por sus comentarios del pasado 31 de Mayo referidos a mi persona, hecho que le agradezco enormemente por ser uno, al igual que yo, de los sobrevivientes de las siete tribus que poblaron este estado y que hoy, como maldición bíblica, se ciernen entre sobre nuestra tierra sedicentes amenazas de un arribismo avasallador y pernicioso, de seudo ambientalistas que vienen por el oro y el moro y lo que es peor, por gobernantes desnaturalizados de media sangre que les vale madre BCS. ¡Pobre patria mía! ¡Viva BCS! ¡Viva BCS! ¡Viva BCS!