• A través del programa PrevenIMSS los pacientes pueden ser asesorados en los módulos de nutrición para tener un estilo de vida más saludable
Para mantener un buen estado de salud, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) en Baja California Sur, mediante su estrategia prevenIMSS hace un llamado a la derechohabiencia para reducir el consumo de sal y evitar complicaciones médicas ya que el abuso de este condimento está relacionado con el cáncer de estómago, osteoporosis, obesidad, enfermedad renal y retención de líquidos.
El coordinador en Medicina Familiar de la Jefatura de Prestaciones Médicas, doctor Israel González Cortés, recomendó que una manera ideal para ir disminuyendo este producto es hacerlo de manera paulatina y con moderación.
Explicó que, aunque la sal juega un papel importante en la alimentación para la conservación de los alimentos, también es cierto que su exceso contribuye a presentar presión arterial elevada que es uno de los factores de riesgo para los ataques al corazón y cerebrales.
Como recomendación médica exhorta a la población derechohabiente a acudir a consulta con su médico familiar y de esta manera realizar estudios de rutina, acercarse a los módulos PrevenIMSS o bien los pacientes se pueden canalizar a los módulos de nutrición para dar un plan alimenticio con más opciones para su dieta diaria.
El especialista señaló que según datos de la Organización Mundial de la Salud el consumo de sal debe ser de 5 gramos por día; sin embargo, se estima que una persona consume entre 10 y 15 gramos diarios, por ello es importante empezar a medir su uso.
Para condimentar los alimentos además de la sal se pueden utilizar otros ingredientes tales como: el ajo, la cebolla, chile, limón, orégano, cilantro o perejil, todos estos libres de sal y con un beneficio mayor al organismo.
Una recomendación más es que al momento de servir la comida en la mesa o cuando se acuda a algún restaurante se evite agregar sal a los alimentos, así como también se pide moderar productos que se conservan por medio de este producto como los embutidos, alimentos enlatados, aceitunas, mariscos, botanas, salsa de soya e inglesa, consomé de pollo, salsa de tomate y los aderezos.
Finalmente, mencionó que adaptarse a estas medidas, al principio puede ser complicado, para ello los pacientes pueden ser asesorados en sus unidades de salud para llevar una vida más saludable.