En los años recientes se han registrado incendios con pérdidas totales de grandes empresas comerciales, como son La Perla de La Paz, el antiguo Centro Comercial Californiano y el año pasado la Tienda Ley Express de la colonia Loma Linda, en los que se dificultó su control por falta de instalaciones y equipos internos suficientes para enfrentarlos desde sus inicios.
En estas condiciones se encuentran igualmente algunas instituciones bancarias, donde se aprecia la falta de instalaciones hidráulicas para abastecimiento de agua a las unidades de las corporaciones encargadas de extinguir conflagraciones, mientras en las cercanías de escuelas o dependencias oficiales, se subsisten los llamados “Hidrantes”, que fueron parte de las medidas de protección contra incendios en el primer cuadro de la ciudad en las décadas pasadas.
Por esta misma falta de equipos preventivos contra incendios y la lejanía de las instalaciones del cuerpo de bomberos, al estar ubicada al extremo sur de esta capital, es que alcanzaron proporciones preocupantes los siniestros registrados a finales del año pasado en dos tiendas departamentales de la popular cadena comercial de publicidad en color amarillo, establecidos en pleno centro de la ciudad, uno de ellos junto a los estacionamientos del transporte urbano y la otras en las cercanías del malecón costero.
Aunque fueron sofocados, después de varias horas de combate, existió el riesgo de que se extendiera el fuego a otros establecimientos cercanos, pero estas situaciones confirman la necesidad de que se instalen suficientes de abastecimiento de agua a las unidades del cuerpo de bomberos.
Estas deben ser parte de las medidas de seguridad que deben mantener las grandes empresas comerciales que solamente cuentan con equipos manuales contra incendios y también detectores humo o calor, que constituyen una forma de alerta temprana suficiente para controlarlos antes de que se conviertan en incendios de grandes proporciones peligrosos para la seguridad del resto de la población.